Aunque ya había estado allí en contadas ocasiones, es un pueblo con un encanto especial, ya que contiene infinitos recobecos y detalles artísticos que hacen que cada visita descubras algo nuevo del lugar.
Para vuestro interes os pongo un enlace del lugar www.turismoderonda.es/indexesp.htm .
Llegamos a eso de las 12:00 del mediodía y nos dirigimos hacia el mirador del archiconocido Tajo de Ronda a través de la concurrida Alameda del Tajo, el día estaba nublado y amenazaba lluvia pero aun así, las vistas eran expectaculares y si te atrevía a mirar hacia abajo desde el balcón, la sensación era escalofriante.
Despúes seguimos nuestras ruta pasando por la monumental plaza de toros (cuya entrada para poder visitarla es tan monumental como el edificio en sí: 6€).
Atravesando el Puente nuevo sobre el Tajo nos dirigimos hacia las Murallas y Puertas islámicas que imponentemente reciben a los turistas a la entrada del pueblo.
Tras pasear sobre sus muros nos dirigimos al Alminar de San Sebastián que se escondía entre empedradas callejuelas.
Siguiendo el paseo pudimos observar los Baños árabes y poco después el Arco de Felipe V desde el puente árabe, observándose desde este punto también el majestuoso Palacio del Rey Moro.
Avanzamos por el Jardín de Cuenca cuyas vistas invitaban a sentarse a contemplarlas aunque fuese sólo un par de minutos.
Y llegamos otra vez al Puente nuevo donde ya cerca de las 17:oo horas pusimos punto y final a nuestra visita a este maravilloso pueblo.
La verdad es que tanto si conoceis como si no el pueblo de Ronda, es una visita que merece la pena.
Espero que os hayais entretenido con esta entrada tanto como yo he disfrutado recordando cada momento y lugar.
Un saludo.
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